Por fiiiiiiin es lunes. (Fine,
hodiaŭ estas lundo).
Tengo la fea costumbre de apuntarlo todo. Es
una muy buena costumbre aunque digo fea porque a veces pasa el tiempo y sigo
viendo escritas las mismas cosas y eso, para mi no resulta antiestético.
Lo positivo de esto es que también puedes ver
de forma sencilla cual es tu evolución en los últimos tiempos. Hace poco
refresqué (por casualidad) uno de esos famosos listados y vi, para mi sorpresa,
que todas las cosas que había apuntado, no hace mas de un año, las había ido
cumpliendo. No tienen porque ser grandes cosas yo apunto todo aquello que
quiero ir haciendo.
Muchas veces ocurre que el día a día nos
supera, y parece que no hacemos nada, pero eso es solo en apariencia. Yo
reconozco, que dependiendo de mi estado de ánimo, puedo ser un ciclón que
arrasa o calma chicha que no apagaría ni una vela encendida.
Supongo que le pasa a todo el mundo. Unas
veces las cosas las vemos como sencillas de conseguir porque nuestra autoestima
está por las nubes y en otras ocasiones se me hace un mundo para, en teoría,
hacer algo sencillo.
Lo que descubrí hace tiempo es que los retos
compartidos son mas sencillos de alcanzar. Y cuando digo compartidos
no quiero decir que los tengamos necesariamente hacer junto a otra persona, que
sí, que también vale, pero lo que intento decir es que un reto compartido es
aquel que presentas a los demás. Es bueno, muy bueno porque nunca cae en el
olvido. La gente que te rodea y aquellos a los que has hecho partícipe de tus
inquietudes, no cesan de recordártelo. Con ello consigues que en tu mente
siempre permanezca presente y en ocasiones surge de ti esa especie de vergüenza
que te hace pensar: jo! Llevo con esto
mucho tiempo y no he hecho nada, que van a pensar de mi. En mayor o menor
intensidad pero siempre terminamos pensándolo. Enhorabuena porque cuando te
llegue ese instante estarás a un paso de ponerlo en marcha y conseguirlo.
Genial. Por fin es lunes. Empiezo la semana
compartiendo.
OP
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