lunes, 28 de diciembre de 2015

NADA ES PARA SIEMPRE


Gooooooooooooood Moooooooooooorning!!
Por fin es lunes.

Cuantas veces me he preguntado ¿esto será para siempre? Y siempre estaba equivocado porque la respuesta va cambiando. ¿Siempre? Joe!!! Que palabra. Según la RAE: “En todo o en cualquier tiempo.”. Según esto podríamos tener diferentes y diferentes posibilidades para esta definición. En todo ¿realmente que está en todo?. Se me ocurren varias cosas: yo mismo, el aíre, el oxigeno … ¿el universo? Si estuviera aquí Stephen Hawking también te diría que no. Pero no llego a encontrar cosa alguna que esté en todo. ¿Es una cuestión de metafísica quizás?
Y sí es en cualquier tiempo pues me pasa un poco lo mismo. El tiempo es efímero y duradero a la vez, por lo que todo llega y todo pasa, siempre. (que ironía).
Quizás la locura, quizás el amor, quizás la esperanza, quizás el valor, quizás los pensamientos, quizás la ilusión…

No se. Quizás haya algo pero mi conclusión es que nada es para siempre. ¿o sí?

Genial. Por fin es lunes. Siempre al principio de la semana.

OP


lunes, 21 de diciembre de 2015

NO ME FÍO


Gooooooooooooood Moooooooooooorning!!
Por fin es lunes.

Siempre me pasa lo mismo. Confío en la gente, por naturaleza, y de eso muchos se aprovechan. Esta semana me volvió a pasar. No por ello voy a parar de confiar en la gente, pero sí que tomaré ciertas precauciones.

La dificultad surge porque por necesidad tenemos que confiar en los demás. Dependemos de otros para amar, para aprender, para trabajar… básicamente sí no eres un ermitaño, tendrás necesariamente interacción con los demás.
Compartir un secreto con un amigo, iniciar una relación de amistad o amorosa, realizar un proyecto comercial, convivir en familia … exige en la mayoría de las circunstancias confianza.
Lo cierto es que no se puede vivir sin confiar, pero no es posible confiar en todo el mundo. Como decía el dramaturgo norteamericano Tennessee Williams: “Debemos desconfiar de unos y de otros. Esta es nuestra única defensa contra la traición”.

En psicología la confianza es una suspensión temporal de la situación básica de incertidumbre sobre las acciones de las personas, es decir, se dejan de lado las dudas y se cree firmemente. La pérdida de confianza se debe a un agotamiento emocional, causado por la mala intención de la persona, que fomenta la incapacidad de cumplir con lo prometido de forma continuada en el tiempo. La confianza, por tanto, simplifica las relaciones personales y ayuda a entenderlas.

Pero todo esto debe ser mucho más sencillo. Desconfiar por defecto de todo el mundo no lo veo, pero actuar con ciertas cautelas. Atender siempre a ese “no me fío de esa persona”, que muchas veces nos sale “instintivamente” y que no es otra cosa que una lectura fugaz del lenguaje corporal que identificamos de forma no consciente.
Y ya que no podemos prescindir de las relaciones, resulta necesario correr los menos riesgos posibles. Debemos pues, aprender en qué personas podemos confiar:
1.      Aquellas personas que conocemos muy bien, basados mejor por lo que hacen que por lo que dicen.
2.      La gente que nos quiere, nos respeta o nos admira.
3.      Aquellos que nos dicen la verdad sobre nosotros y no están siempre de acuerdo con nosotros.
4.      Aquellos que no tienen un interés especial en obtener algo de nosotros.
5.      Los que son por defecto discretos, responsables y coherentes entre lo que dicen y lo que hacen.
Yo he llegado a la conclusión que los engaños suelen venir dados por ignorancia y se pueden perdonar, pero la traición viene dada por un ánimo egoísta que actúa de forma fría, indiscriminada y por sorpresa que es cuando más duele. Y ahí perdonar es cuestión particular de cada uno.

Como conclusión me quedo con una frase de George Washington: “Se cortés con todos, pero con pocos íntimo y cuida a quién le das tu confianza”.
Esta semana me traicionaron, por lo que para la próxima vez tomaré más precauciones.

Genial. Por fin es lunes. Empiezo la semana con precaución.

OP


lunes, 14 de diciembre de 2015

TODOS LLEVAMOS UN SAVANT DENTRO


Gooooooooooooood Moooooooooooorning!!
Por fin es lunes.

Pensando un poco en mis cosas, que es algo que debería hacer con más frecuencia, me encontré con el término savant.
Según Darold Treffert, una posible explicación que da pie a este síndrome es que cuando el hemisferio izquierdo no funciona bien, el derecho lo compensa desarrollando nuevas habilidades, posiblemente reclutando tejido neuronal que en condiciones normales se destina a otras funciones. Otra posibilidad, es que la lesión en el hemisferio izquierdo destape habilidades que habían estado latentes debido a lo que se conoce como la "tiranía del cerebro izquierdo dominante".
Vamos, que se convierte una posible lesión o modificación del cerebro se convierte en algo excepcional ¿pero es realmente esto?
Los savant, destacan en muchas actividades pero se suelen concentrar en cuatro grandes grupo.
  • Arte. Grandes intérpretes musicales, sobre todo al piano, habilidosos escultores y pintores. Por eso el arte es uno de sus campos a destacar.
  • Memoria. Pueden memorizar calendarios y recordar fechas importantes.
  • Cálculo. Son unos magos de las matemáticas, pueden hacer cuentas impresionantes en su cabeza, incluso divisiones con 100 decimales.
  • Ubicación. Pueden medir distancias casi exactas sin medidores, memorizar direcciones y mapas, y manejar las escalas de las maquetas a la perfección.
Sí, una persona con síndrome savant es una especie de genio, que destaca en una cierta habilidad como leer y memorizar 12.000 libros, o dibujar una ciudad entera como Roma sin errores después de haber sobrevolado una vez sobre ella, o saber hacer cálculos mentales matemáticos con resultados imposibles hasta para muchos modelos de calculadoras…

Por supuesto no todos los sabios o personas inteligentes tienen este problema, porque increíblemente hay gente que le llaman problema,  pero quienes tienen este síndrome se caracterizan, aparte de su genialidad, también por algunos otros rasgos en común.
La mayoría de ellos suelen ser autistas, y pese a tener grandes dotes, habilidades o talentos son incapaces de realizar algunas otras tareas más sencillas y cotidianas como atarse los cordones de los zapatos, abrocharse el botón de una camisa o vestirse solos.

Psicólogos como Allan Snyder y John Mitchell aseguran que "todos llevamos un savant dentro". Nuestro cerebro, reúne todos los datos que nos llegan, los procesa y suprime la información que “no sirve” para poder crear una única idea, que es la que se hace consciente. En el cerebro de los savants la información no se "edita", el resultado es similar a "ver las imágenes con mucho detalle, como los píxeles individuales en una fotografía", en resumen, los savants no tendrían porque tener más poder mental que nosotros, sino todo lo contrario. Lo que nos permite afirmar que todos podemos llegar a ser, tener o desarrollar alguna capacidad o talento que sea única, y ser nuestro propio savant.
Se trata pues de hurgar en nosotros mismos hasta encontrarlo.
Seguro que si te pones a pensar en ello, descubres algo que haces con cierta habilidad, lo que ocurre es que quizás en este mundo que nos ha tocado vivir pues no existe una aplicación práctica… por el momento.

Genial. Por fin es lunes. Hurgando.

OP


lunes, 7 de diciembre de 2015

CIRCUNSTANCIAS APROPIADAS


Gooooooooooooood Moooooooooooorning!!
Por fin es lunes.



¿Cuántas veces te has preguntado eso de…?“pero esto que estoy haciendo ¿sirve para algo?”. Muchas veces andamos enredados en “malos rollos” ,“tribulaciones”, “desagravios” ,“sufrimientos”, por algo que ni nos va, ni nos viene. Es verdad, todos llevamos un “abogado defensor” (o fiscal según se mire) dentro de nosotros y nos envalentonamos con causas “pobres” que no van más allá de la puerta de nuestra casa, o que arreglarían el mundo pero que no suele pasar de ahí… pues bien eso tiene un nombre: Cobardía.
¿Cómo?... Sí, cobardía. Porque lo que realmente hacemos es enfrentarnos de una forma verbalmente agitada pero que en realidad no lo haríamos de verdad. Intentando que los demás aprendan de nosotros y nos atrevemos a dar consejos pero tenemos claro que si se nos diera personalmente esa misma situación, ese mismo suceso, raramente reaccionaremos de la misma forma como contamos.
Ese famoso …. “pues yo le diría esto” o “yo haría esto” que luego dista de la realidad.
Sin embargo, con muchos de nuestros pequeños problemillas diarios procrastinamos de forma adecuada, siempre buscando, esperando que otro haga de abogado por nosotros.
Pero está claro que hasta aquí hemos llegado. Hoy es lunes y se acerca el final del año. Es momento de ponerse a cambiar cositas para que el año que viene sucedan grandes cambios.
Hoy es un gran día para empezar a cuestionar, a pensar, a cambiar todo aquello que nos va molestando, a aprender a ser asertivos, defendiendo aquello que nos interesa de forma pausada, sin ofender, ni dañar a nadie.
Sí, hoy se dan las circunstancias apropiadas para empezar a llamar las cosas por su nombre, con educación pero con valentía. A no estar callado con aquello que nos molesta o nos incomoda. Hoy es lunes, que gran día.

Genial. Por fin es lunes. Con alegría y sin cobardía.

OP