Gooooooooooooood
Moooooooooooorning!!
Por fin es lunes.
Quien dice hijos, dice
amigos, dice vecinos, conocidos…Ya no sirve todo aquello que nos contaron.
Carrera, master,
idiomas, experiencia y … ¿ahora qué? Ya todo eso no sirve para encontrar
trabajo. Y ¿qué le digo yo ahora a mi hijo? Porque ya no quiere estudiar y con que
cara le digo que se tiene que forjar un futuro.
Mejor que se haga
político, o sindicalista… a si no le faltará nunca un puesto de trabajo, y de
los buenos (jajaja).
Pues bien, ahora en
serio, ¿qué debería hacer un joven en España ahora? Sin duda creo que lo más
interesante e inteligente es dedicarse a lo que uno quiera: abogado,
economista, ingeniero, arquitecto, peluquero, charcutero, mecánico o policia.
Todos llevamos dentro
un talento, lo que pasa es que no lo sabemos o no lo queremos saber, porque en
realidad nosotros si lo sabemos porque nos conocemos muy bien pero nos han
educado para ser lo que otros quieren, casi siempre, lo que tus padres quieren
para ti que en teoría es todo bueno, eso si, en la mayoría de las veces sin
contar contigo.
He visto a lo largo de
mi vida como la gente más feliz es aquella que consigue trabajar en lo que
quiere ¿por qué? Pues posiblemente porque como dijo Disney: “Si haces de tu hobby una profesión, no
volverás a trabajar nunca”.
Como padres lo que
debemos es ayudar a nuestros hijos a descubrir su talento (todos tenemos) y
apoyarlo para que lo desarrollen al máximo. Dejando de lado lo que nosotros
creemos que es mejor, porque hoy por hoy, no podemos ver el futuro.
Hay talento para todo
y en todas las profesiones y no siempre está directamente relacionado con los
estudios realizados. Músicos ópticos, actores médicos, agrónomos en marketing,
o militares con bellas artes… los ejemplos son miles, pero siempre nos fijamos
en el éxito de ciertas personas, o lo que nosotros consideramos éxito que eso
es para otro día.
Ciertas profesiones
pasan irrebatiblemente tienen que forjarse en la universidad. No concibo un médico
autodidacta, pero entendiendo cual es el futuro que nos vamos a dirigir para
que no surja la desmotivación.
Creo que no nos debemos
preguntar ¿qué
le digo yo ahora a mi hijo? Más bien deberíamos escucharles, pero desde
dentro, con toda nuestra seriedad y honestidad para poder apoyarles en lo que
ellos quieran o sepan ser. Entendiendo que las cosas han cambiado y mucho, y
que mejor que un posgrado es hacer un módulo de FP. No me he vuelto loco, piénsalo
un poco y verás que nos faltan muchas cosas básicas…
Genial. Por fin es
lunes. Buscando el talento.
OP
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