Gooooooooooooood
Moooooooooooorning!!
Por fin es lunes
Cabe pensar como un
simple café se puede convertir en el símbolo de un país. Curioso y sorprendido
estoy de como un café elaborado de forma muy original y a partir de un producto
poco natural se ha hecho con la mañanas de una nación. Nació como un concepto
muy original: el tercer lugar, un
ambiente agradable fuera de casa o del trabajo que serían nuestros otros dos lugares más habituales.
Sin embargo hoy a día
de hoy ha triunfado más otra de sus ideas que es acercar el producto a la
calle. Me fascina entender como dos ideas tan antagónicas han supuesto un
atractivo para tan variado público en el mundo a la vez. Estar en una lugar
recogido donde puedes disfrutar de una agradable espacio, con sofás, música
tranquila y wi-fi gratis, choca con la idea de tener ese mismo producto para
llevarlo por la calle a todas partes. Pero ahí está: Starbuks.
En Estados Unidos no
es fácil encontrar a alguien por las mañanas yendo a trabajar sin su baso en la
mano y por las tardes es complicado encontrar un sitio para sentarse. En otros
países funciona de forma diferente pero funciona.
Y ahí están ellos
implicados al máximo por su público hasta tal punto de publicar una página a
todo color en el mismo New York Times para abroncar a los senadores que
mantienen paralizadas muchas instituciones de Estados Unidos por mantener la
presión contra su presidente, Barack Obama, para que no lleve adelante su plan
de sanidad para todos.
Y no criticaban una
idea u otra solo el echo de que el Senado esté desatendiendo y desoyendo a la
gente de su país. Todo un ejemplo de implicación con su público. Eso que los
ingleses llaman el engagement: “enganchado” pero de forma comprometida.
Si nunca has estado en
uno de sus establecimiento debes probarlo y, casi con toda seguridad, repetirás
pese a su elevado precio del producto que podría parecer un hándicap tienen ese
saber hacer, el trato de su personal, como huelen, como te sientes dentro en
una ambientación muy confortable. Te hacen sentir bien por dentro y por fuera,
viendo que es una empresa implicada en hacer más fácil y cómoda la vida a la
gente. Y todo ello durante más de 40 años de vida y con más de 15.000
establecimientos repartidos por los cinco continentes en su haber. Tanta gente
no puede estar equivocada. La clave: el compromiso. Sencillo pero efectivo.
Personalmente no lo
practico mucho porque no tomo café pero reconozco y elogio sus méritos como
empresa y como negocio.
Genial. Por fin es
lunes. Tacita a tacita, enganchando.
OP
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