lunes, 5 de marzo de 2018

MEJOR UN POCO CRITICÓN


Por fiiiiiiin es lunes. (Finisciu, oghje hè luni)

Todos tenemos nuestras verdad, esa que llevamos dentro. Y no por ello tiene que estar cerca de la realidad.

Pensar de forma diferente conlleva, requiere, la habilidad de razonar y consiste en aprender de todo de una forma activa. Cuestionando la realidad en vez aceptarla tal cual, buscar una posición que no sea la instaurada y defenderlo con nuestro propios argumentos.
Pensar con claridad, de forma racional, estableciendo conexiones lógicas e independientes entre varias ideas para llegar a conclusiones que difieran de los establecido, de esta forma se crea nuestra propia verdad. No es una verdad paralela es, simplemente nuestra realidad.

Cuestionar absolutamente todo en lugar de asumir que las cosas que nos rodean son sí o sí, porque siempre se ha hecho así. Es justamente esa forma de pensar la que nos conlleva a una libertad sin límites. Buscar argumentos, y se trata sobre todo de esto, que defiendan de forma inteligente y asertiva nuestra verdad. No se trata de volverse loco si no de hacer y pensar las cosas de diferente forma.

Podemos empezar buscando inconsistencias y errores habituales de razonamiento. Por ejemplo nuestro sistema educativo es el que es, desde el siglo XVII, porque siempre se ha hecho así, todos hemos pasado por él, y nos han educado así… ¿pero se puede hacer de otra forma? Porque han pasado varios siglos desde que nuestros tatarabuelos, que ya estudiaban con un libro encima de la mesa, y esto se sigue haciendo igualmente… pues sí, si buscas (no hace falta mucho) en Internet verás que ya la forma de estudiar ha cambiado, por ejemplo, aprendizaje de conocimiento a base de tutoriales. Sí alguien no se hubiera planteado pensar de otra forma todo segaría igual.
Conectar ideas y enlazar ciertos pensamientos. Ver cual es la importancia de cada argumento o idea principal para llegar a la raíz. Construir nuevos argumentos intentando detectar cuales son las áreas de mejora para sustraer conceptos que difieran de lo habitual.

Pero esto no hace falta hacerlo todo el tiempo porque no todas las decisiones que tomamos a lo largo del día son relevantes, basta con ser algo lógico e intuitivo, que son dos conceptos antagónicos pero que nos mejoran según cada una de las situaciones a las que nos estemos enfrentando.
Cómo ejercicio práctico no seas complaciente contigo mismo y vuélvete mejor un poco criticón.
Nunca de las cosas por sentado, no pienses que siempre tienes la razón, cuando sea complicado divido en partes y ve siempre a la posición mas sencilla e investiga. Nuestro cerebro es una máquina muy potente que no tiene límites.
Genial. Por fin es lunes. Repensando en paralelo.

OP 


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